El Museo de Arqueología de Pontevedra renueva sus planteamientos expositivos con una propuesta que refuerza el protagonismo de las piezas arqueológicas y establece una continuidad formal del mobiliario y los soportes gráficos, definiendo un itinerario intuitivo que orienta al visitante y crea atmósferas diferenciadas, permitiendo la jerarquización de la información y la óptima exposición de los objetos. Además, sus instalaciones se “conectan” virtualmente a un nuevo espacio cultural, el Centro de la Cultura Castreña de Lalín, que ocupará tres de los módulos circulares del edificio de servicios municipales de la localidad, construido por el estudio Mansilla y Tuñón como una suerte de “castro tecnológico”. En él se desplegará una amplia oferta de contenidos relacionada con la cultura castreña de la comarca del Deza, su historia y unas tradiciones que, renovadas, han pervivido hasta hay en ámbitos como el paisaje, la literatura o la gastronomía. Todos los aspectos del proyecto —desde el planteamiento y la realización de los contenidos textuales, gráficos y audiovisuales hasta ejecución de la museografía— han sido objeto de un concurso del que ha resultado adjudicataria Empty, que ha contado con la colaboración del museógrafo Víctor Imperial y del arquitecto Andrés Ibáñez.