Reacondicionamiento de zonas comunes en el edificio Cuzco IV, Madrid

Remodelación integral de zonas comunes: vestíbulo principal, vestíbulos de 4 sótanos y vestíbulos de 22 plantas con nuevos suelos, techos, revestimientos, puertas, mobiliario, instalaciones y elementos audiovisuales; urbanización exterior.

Cuzco IV es una torre de 22 plantas y 4 sótanos de aparcamiento ubicada en el centro financiero de Madrid. Teniendo en cuenta las ordenanzas que limitaban su altura y volumen, el arquitecto Mariano García Benito la proyectó y construyó (1975-1979) según un esquema estructural y compositivo tripartito: tres crujías, la central con más altura y anchura que las laterales para dar cabida a ascensores, escaleras, aseos y otros servicios. El acceso principal del edificio se sitúa en una de las crujías laterales, de modo que es preciso cruzar el vestíbulo principal para llegar al núcleo de comunicaciones de la crujía central, cuyos vestíbulos de planta, como el principal, han sido objeto de intervención.

El proyecto de remodelación, diseñado por el estudio Ramón de Arana, ha renovado la imagen del edificio mejorando la accesibilidad y funcionalidad del mismo. El vestíbulo principal se ha reformado íntegramente a través de rampas, mesetas y puertas automáticas que facilitan el tránsito. Además, puertas, registros y armarios quedan ocultos e integrados en un espacio definido por materiales pétreos y metálicos.

El cliente planteó dos retos a resolver. El primero, realizar una reforma integral de los espacios comunes mientras el edificio seguía en uso, resolviendo circulaciones y organizando los trabajos de forma que afectasen los menos posible a los inquilinos. El segundo, limitar la actuación en cada uno de los vestíbulos de planta a 30 días, igualmente con el objetivo de minimizar las molestias para los usuarios.

La limitación en el tiempo de actuación por planta obligó a encadenar los trabajos en una secuencia que implicó solicitar los suministros a fábrica antes incluso de iniciar las demoliciones y poder realizar unas mediciones precisas. Gracias a las soluciones técnicas implementadas, al esfuerzo de todo el equipo en el control de calidad y al compromiso de los proveedores con los que Empty ha trabajado, pudo alcanzarse el objetivo de ejecutar la obra sin alterar un día de la planificación, cumpliendo además con los hitos establecidos y logrando que todos los elementos quedaran perfectamente integrados en un diseño
muy exigente.