¿Por qué las obras de Apple nos han hecho mejores?
Óscar Sáez, director general de Empty
Apple nos ha ayudado en numerosos aspectos de nuestro trabajo. En primer lugar, el grado de exigencia, detalle y perfección con el que hacen las cosas, por encima de cualquier otro requerimiento. Este punto de partida, aunque estaba totalmente alineado con nuestra filosofía, ha llevado a Empty mucho más lejos no sólo en el afán de rigor, sino también en la aceptación de nuevos retos, de nuevos escenarios de actividad y de gestión.
Muestra de los estándares de exigencia mencionados son proyectos como el de Puerta del Sol 1, en Madrid, donde realizamos una intervención estructural compleja, recolocando todos los pilares de fundición de las plantas baja y primera, manteniendo el edificio sustentado mediante una estructura auxiliar de apeo, replicando mediante fundición nuevos pilares y volviendo a descansar el edificio en la nueva estructura. O el proyecto de Paseo de Gracia 1, en Barcelona, con una reconstrucción de la fachada realizada con sillares y piezas labradas de piedra de Bateig y, en el interior, una monumental escalera de vidrio y revestimientos de acero inoxidable.
Y cómo no, el último proyecto para la firma realizado en la emblemática Via del Corso de Roma, en el que grandes piezas de mármol de Carrara, combinada con suelos de terrazo y carpinterías de madera, techos acústicos integrados en bóvedas, cornisas y techos con carácter histórico encajan entre sí para lograr una armonía en la conjunción de materiales con los que se recupera y renueva la arquitectura del palazzo decimonónico, una armonía manifiesta en cada una de las juntas que recorren los espacios, cuya sincronía geométrica orquesta esos encuentros materiales.
Por otra parte, tener a Apple entre nuestros clientes nos ha impulsado a introducirnos en un contexto cada vez más internacional.
Y ello sin abandonar los proyectos singulares que han caracterizado la trayectoria de Empty. De su mano hemos trabajado en proyectos en Reino Unido, Francia, Italia y Turquía, en los que han participado proveedores de todo el mundo. Este reto de implantarnos en nuevos países, desarrollar la estructura administrativa, logística y de personal necesaria para acometer los proyectos, es algo que tenemos bien aprendido. Y ese aprendizaje nos ha llevado también a saber cómo adaptarnos a la cultura, las costumbres y formas de entender el proceso de construcción, las normativas técnicas y regulaciones locales.
Nos ha ayudado también a comprender que el mundo es un mercado global y que la búsqueda de los mejores proveedores no debe circunscribirse al entorno más cercano, sino que hay que abordarla con una visión amplia, en la que podemos conjugar suministradores es de todo el mundo. Es el caso del proyecto de tienda insignia en Estambul, donde esos proveedores son de Japón, Dubái, Italia, Francia, España, Reino Unido y Estados Unidos, por nombrar sólo algunos.
Además, con Apple estamos siempre aprendiendo e innovando. Cada proyecto es un nuevo desafío por su diseño, materiales, localización y soluciones constructivas. Ello acelera el aprendizaje de todo el equipo y es un incentivo para formarnos de forma continua y afrontar con las máximas garantías cualquier nuevo reto.
Uno de los trabajos de los que nos sentimos más orgullosos, y con los que más hemos aprendido, es el desarrollado con el equipo de I+D en Cupertino, sede central de la empresa, que nos ha llevado a abordar investigaciones relacionadas con la búsqueda de aleaciones metálicas con propiedades y acabados que no existían en el mercado hasta ese momento, terrazos prefabricados de gran formato, vitrinas especiales con aperturas automatizadas y fácilmente configurables en su composición interior, estudio sobre productos para la protección de la piedra, desarrollo de diferentes piezas mecanizadas en bronce —como tiradores y señalética—, puertas de vidrio de gran formato a prueba de intrusos, con perfiles reducidos de acero que albergan todos los mecanismos de apertura y seguridad y, sobre todo la realización de numerosos prototipos, varios de ellos ejecutados en Cupertino.
Incluso tenemos abierta una línea de producción de pequeños documentales sobre la ejecución de algunos de los proyectos más emblemáticos de Apple que nos han llevado a realizar grabaciones en Macao o Bangkok.